Para un
contratista constructor son ciertamente muchos los riesgos que se contraen por
la naturaleza de una contratación EPC (Ingeniería, Procura y Construcción) suma
global (EPC Lump Sum). Con este sistema de contratación, la empresa propietaria
del proyecto traslada al contratista los riesgos de una determinación de
cantidades de obra necesarios para presupuestar. Este sistema es el que están
manejando las industrias energéticas y de manufactura y significa que el
contratista debe estimar y presupuestar su propia estimación de la cantidad de
obra.
Cuando
además, los términos de referencia que se preparan para la licitación requieren
como parte de los trabajos hacer ingeniería de detalle porque solamente se
suministra una ingeniería básica, el riesgo es mayor porque normalmente no hay
tiempo para hacer una ingeniería de detalles en el corto período del proceso de
licitación. Significa entonces que se tienen que estimar cantidades de obra con
un margen de error positivo o negativo y asumir el error en el caso de una
cantidad estimada menor a la que finalmente se requiera para la instalación.
El riesgo de
una mala estimación se minimiza con buenos pre-diseños que completen la
información suministrada en los términos de referencia. Pero para esto la
empresa licitante de la obra EPC debe contar con un equipo de ingeniería lo
suficientemente fuerte o tener asociada una empresa de ingeniería que en primer
lugar haga una estimación adecuada en la corta etapa de licitación y después
realice (o complete) la ingeniería de detalles con el criterio de no exceder
cantidades requeridas por la obra.
Las
principales causas de fracaso en contratos EPC son:
·
Obras o equipos no previstos en la fase de
licitación y por consiguiente no presupuestados;
·
Cantidad de obra estimada insuficiente. Esto
puede ser por debilidad o inexperiencia del equipo técnico.
El fracaso
del contratista EPC es un fracaso del proyecto ya que trae como consecuencia
retraso en el tiempo de construcción y peor aún puede incluso llevar a la
quiebra a una empresa contratista. Todos estos problemas inciden negativamente
en la ejecución de un proyecto incluso afectan severamente al ente propietario
ya que normalmente el aumento en el tiempo de ejecución de una instalación
requiere de un aumento del financiamiento de ella. Incluso se pueden considerar
las pérdidas por lucro cesante al no poder iniciar la producción de la
instalación en la fecha estipulada.
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